Propagación inconsciente: la característica de la variante Delta que la hace más contagiosa
Un estudio publicado en la revista Nature asegura que los enfermos transmiten el virus hasta dos días antes de mostrar síntomas.
Desde su primera identificación en octubre de 2020, la variante Delta comenzó a ganar terreno en todo el mundo. Hoy se encuentra en más de 140 naciones y modificó las estrategias ante la pandemia. Ahora, un estudio publicado en la revista Nature, que no cuenta con la validación de pares, develó que los infectados con esta mutación del Covid-19 contagian hasta 48 horas antes de mostrar síntomas, con lo cual duplica la venta de propagación inconsciente.
“Las personas infectadas con la variante Delta del SARS-CoV-2 tienen más probabilidades de propagar el virus antes de desarrollar síntomas que las personas infectadas con versiones anteriores”, asegura un estudio realizado sobre un brote registrado en Guangdong, China.
En base al análisis de 101 personas que se infectaron entre mayo y junio de 2021, esta investigación señaló que, en promedio, aquellos que se contagiaron con esta variante comenzaron a mostrar síntomas 5,8 días después contraer la enfermedad.
Es decir, que los síntomas aparecieron en un promedio de 1,8 días después de que dieron positivo en el test de PCR. De este modo, la ventana de propagación inconsciente de la enfermedad, porque las personas se sienten bien y no muestran evidencias de la patología, se ubicó cercana a los dos días.
“Es más difícil detenerlo”, evaluó Benjamin Cowling, epidemiólogo de la Universidad de Hong Kong y coautor del estudio publicado en la prestigiosa revista científica Nature y que aún aguarda la revisión de sus pares.
Asimismo, Cowling señaló que habían analizado las ventanas de propagación inconscientes de las otras variantes en un estudio que habían realizado previamente, pero que no publicaron.
“Antes de que surgiera la variante Delta, las personas infectadas con SARS-CoV-2 tardaban, en promedio, 6,3 días en desarrollar síntomas y 5,5 días en dar positivo al PCR. Con lo cual, la ventana de diseminación viral inconsciente estaba se encontraba en 0,8 días”, afirmó el investigador.
Es más, los científicos lograron detectar que los infectados con la variante Delta presentan concentraciones más altas de virus en las partículas virales o carga viral.
Los investigadores destacaron, además, que el 74% de las infecciones por Delta se produjeron durante la fase presintomática. “Estos datos ayudan a explicar cómo esta variante ha podido superar tanto al virus de tipo salvaje (original) como a otras variantes para convertirse en la cepa dominante en todo el mundo”, señaló Barnaby Young, médico especialista en enfermedades infecciosas del Centro Nacional de Enfermedades Infecciosas de Singapur.
Según las estimaciones de los científicos, el R 0 de la Delta, número que permite calcular cuán contagioso es un patógeno al analizar el promedio de personas susceptibles que contagia cada infectado, se encuentran en el 6,4, muy superior al 2-4 de las mutaciones anteriores.
Para explicarlo de manera sencilla, si el virus original de una persona “saltaba” a dos y de dos a cuatro, en la variante Delta de una persona se propaga a casi 6 personas y media, las cuales terminarán infectando a unas 42.
“La Delta se mueve un poco más rápido, pero es mucho más transmisible”, afirmó Marm Kilpatrick, investigadora de enfermedades infecciosas de la Universidad de California, Santa Cruz.