Profesionales de la provincia trabajan para clasificar los archivos de la reducción de Napalpí
Un equipo integrado por el Archivo Histórico de la Provincia y la Dirección de Patrimonio dependiente del Instituto de Cultura del Chaco, junto al IGHI Conicet-UNNE, Facultad de Humanidades de la UNNE y la asociación comunitaria Renacer Napa`alpí hace un año trabaja en rescatar la documentación que se generó en la administración cuando funcionaba en la reducción de Napalpi. los protagonistas en una jornada de trabajo, en Colonia Aborigen.Desde hace un año que se eligió intendente el 17/09/2023 y comenzó a funcionar el municipio de Colonia Aborigen. En ese territorio se había fundado el 27 de octubre de 1911 una de las reducciones en la provincia. El establecimiento se ubicó a la altura del km 142 en la línea del ferrocarril, en los lotes 38, 39 y 40, lugar en donde se había emplazado el antiguo fortín militar de Napalpí; cubría por entonces 20.000 hectáreas fiscales reservadas. El edificio del fortín, según contó a Vanesa Barrientos, del equipo Renacer Napa´alpí, «funcionó desde 1911 pero no hay registros de cuándo comenzó o cuando había terminado su construcción. Lo cierto es que aún con más de cien años se mantiene en píe».
El director del Archivo Histórico de la Provincia «Monseñor José Alumni», César Obes, comentó que hace un año están trabajando en Colonia Aborigen. «Estamos rescatando la documentación que se generó cuando estaba la reducción de Napalpi. En el edificio que era de la administración de la reducción rescatamos documentos históricos. Aparecen ahí documentos sobre la venta de algodón, por ejemplo. Pedidos de semillas, para alambrar, libros contables, censos, provisiones, etc. También estamos encontrando nombres e identificando a los que acopiaban algodón. Figuran datos importantes. Lo que hacemos es rescatar esa información y darle un orden que en el término archivístico se denomina proceso técnico. Entre todas las personas que concurrimos a este lugar para realizar el rescate documental nos dividimos las tareas en grupos, dónde un grupo se dedica a limpiar con pinceles los documentos, nosotros como archivistas quitamos todos los elementos metálicos que unen las hojas, ya que están muy oxidados y dañan al papel, identificamos los documentos y ordenamos por temas. Parte económica, social, cultural, censos poblacional, entre otras».
Cabe destacar que esta labor en conjunto se realiza como parte de las reparaciones históricas tras la sentencia del Juicio por la Verdad de la Masacre de Napalpí. La intención es recuperar la documentación encontrada en la antigua administración, crear un archivo histórico y convertir ese edificio de 1911 en un Museo.
Equipo de trabajo
Desde agosto del año pasado un equipo viaja una vez por mes para limpiar, ordenar y clasificar la documentación encontrada. El mismo está integrado por el archivo histórico de la Provincia, Obes César, Correa Dina, Maciel Mercedes Zulma Díaz y Quiroz Fabio. La dirección de Patrimonio Gabriela Barrios, ambas instrucciones dependientes del instituto de Cultura. Por la facultad de Humanidades están presentes Marta Fernández y Yamila Liva. Por el IGHI Conicet, Emilia Cao, Soledad Almirón y Martina Vázquez. Por la asociaciones comunitaria Renacer Napa» alpí está Vanesa Barrientos y Viviana Notagay.
Documentos valiosos
Soledad Almirón, investigadores del Conicet de la Universidad Nacional del Nordeste estuvo la semana pasada junto al equipo de trabajo. Ella además viene puntualmente investigando temas relacionados con las comunidades indígenas de la provincia del Chaco. Su área específica es la educación y los temas relacionados con la lingüística.
Hace unos días atrás, mientras el equipo de trabajo dividía tareas en distintas mesas, Sol Almirón hizo una pausa para explicar a NORTE que junto a sus colegas investigadores acompañan el proceso de constitución de este archivo que será muy valioso en el sentido que permitirá reconstruir gran parte de la historia del Chaco. «Los documentos que encontramos son muy valiosos. La información que aportan estos documentos les permitirá tanto al estado como a las comunidades indígenas conocer las políticas y las acciones que se han hecho durante estos años. Además será valioso cuando se tenga que definir políticas estatales o políticas públicos vinculados con indígenas. La historia está documentada, nos tiene que servir para no cometer los mismos errores y para reforzar aquellas cosas que si se han hecho bien a lo largo de todos estos años», argumentó Almirón.
Vanesa Barrios, de Renacer Napa´alpí
«Los aportes en la construcción de la historia son colectivos»
Los distintas profesionales viajan una vez por mes a Colonia Aborigen. Extienden su jornada laboral durante todo el día. Luego vuelven a Resistencia. Excepto quienes viven en la localidad. El lugar había sido el epicentro de la reducción de Napa`alpi, donde tuvo lugar la masacre el 19 de julio de 1924, donde las comunidades qom y moqoit que reclamaban condiciones de vida y de trabajo dignas.
Los investigadores desempolvan los documentos que estaban en la antigua administración fundada en 1911. Trabajan en un edificio del IDACH dentro del mismo terreno, a casos metros del antiguo edificio. NORTE entrevistó a Vanesa Barrios, de Renacer Napa´alpí, en el patio, entre medio de las dos construcción.
Vanesa comentó que es parte del equipo que trabaja haciendo limpieza y clasificación de los archivos de la reducción. «La intención es hacer una memoria colectiva, revisar las distintas políticas de los distintos tiempos desde 1911. Estos trabajos lo venía haciendo Juan Chico. Los aportes en la construcción de la historia son colectivos, tanto de investigadores como de la comunidad de Colonia Aborigen en general», sostuvo.
Sobre el edificio histórico Vanesa comentó que no se sabe específicamente en qué tiempo comenzó su construcción. «Solo hay datos que en 1911 estaba y funcionaba como estructura política, no estaba vinculado a ninguna religión. No era como en otros asentamientos donde había estructura religiosa», explicó.
Napa´alpí
Napa´alpí es una palabra en qom que significa lugar de muertos, cementerio o lugar donde descansan las almas. Esto le da un significado espiritual que es el proceso de la muerte y lo que pasa después. «Este sentido espiritual tiene relación con los diálogos que tenemos en el seno de la comunidad donde tratamos de recuperar nuestros sitios sagrados», desliza Vanesa en todo pausado y firme. «En este sentido hay que aclarar que cuando hablamos de sitios sagrados no hablamos como un espacio de tierra, sino como todo un contexto de sitio en sí mismo. En la actualidad los distintos procesos políticos fueron ocupando o fragmentando en departamentos, en localidades y con la urbanización achicando el espacio del pueblo indígena. Debemos poner en discusión, más allá de la urbanización, cual es el contexto y el espacio que les va quedando a los pueblos indígenas».
Tesoro para las futuras generaciones
Es importante este trabajo de rescatar el archivo para las generaciones que vienen. «Nosotros tenemos que dejar a la generaciones que vienen cosas para que puedan reflexionar entre lo positivo y lo negativo, ellos no van a poder construir, restaurar o salvar lugares que aportan a la vida desde la naturaleza sino conocen la historia. Eso tenemos los pueblos originarios. En estos documentos se puede hacer distintas evaluaciones y en eso se puede avanzar porque las nuevas generaciones pueden estudiar estos documentos».
Por último Vanesa destacó todo el trabajo de investigación que se realizó en el marco del Juicio por la Verdad tras la Masacre de Napa`alpi. «Nos puso a nivel latinoamericano en un lugar muy importante en sintonía con las luchas indígenas. Creo que cuando se empiece a escuchar qué defendemos cuando hablamos de tierra, territorio, es una temática que debe analizarse con la ética y la prudencia que eso corresponde para poder garantizar la vida de todos, tanto de los humanos y como de la naturaleza».
Gabriela Barrios, directora de Patrimonio Cultural
Reconstrucción y valoración de la política indígena en la provincia
Con los guantes blancos enfundados y barbijo, la directora de patrimonio del Instituto de cultura de la provincia del chaco, Gabriela Barrios, charló con NORTE. En la sede del I.D.A.CH (Instituto del Aborigen) en Colonia Aborigen, estaba en una de las mesas clasificando información.
«Estamos trabajando en la limpieza y clasificación de la documentación. Estamos trabajando para generar un archivo histórico que formará parte del acervo inicial del museo de lo que fue la reducción de Napalpí», comentó Barrios.
Este archivo será importante para la reconstrucción y valoración de la política indígena en la provincia. Los archivos más antiguos que encontraron son libros de 1923 en adelante. Barrios comentó que hay un documento en particular que le parece interesante – el que tiene el registro de 1924 con los nombres de las familias que estaban en colonia aborigen. El documento tiene observaciones, descripciones e información que va a permitir investigar más detalladamente la trayectoria de los familiares. También se puede reconstruir la política económica en relación a la reducción, sobre la artesanía, lo productivo, sobre los encuentros culturales también.
«Hay una serie completa de documentos que no teníamos antes. Esperamos que esto se constituya en un archivo de uso público. Cuando tengamos el edificio en condiciones estará a disposición para que cualquier persona pueda consultar la documentación», destacó Barrios.
Importancias de la documentación
Como todo archivo histórico nos permiten mirar desde un presente el pasado. «El presente va cambiando y nos permite mirar ese pasado de manera diferente. Son los documentos que en diferentes contextos nos permiten reconstruir el pasado», comentó Gabriela Barrios al tiempo que destacó, «en el juicio por la Verdad se demostró lo importante que es la memoria. Los documentos junto a los relatos nos permiten ver cómo fue el proceso histórico. Para nosotros la política indígena en el Chaco ha sido diferente a los distintos territorios y creemos que es importante disponer de estos documentos para investigaciones presentes y futuras acciones».
fuente diario norte