Libre Competencia
Gobierno Oficializó El Fin Del Monopolio De Intercargo: Los Detalles De La Resolución
Se concretó la libre competencia del servicio de rampa en todos los aeropuertos. Inclusive las fuerzas de seguridad podrán colaborar si se pone en riesgo el vuelo.
La Secretaría de Transporte del Ministerio de Economía aprobó una nueva normativa para los servicios aeroportuarios de atención en tierra y rampa. La notivia llega luego de la publicacion de una resolución publicada en el Boletín Oficial. El Gobierno nacional ya había anticipado la decisión luego del paro de Intercargo.
La medida desregula las tarifas de estos servicios, permitiendo que los operadores establezcan libremente los precios en un marco de competencia. La norma responde a la necesidad de un «abordaje sistémico e integral» para estos servicios, que anteriormente estaban sujetos a tarifas reguladas por la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC).
La nueva normativa establece que los servicios de rampa y de atención en tierra deberán presentar su solicitud ante la Subsecretaría de Transporte Aéreo para recibir la autorización correspondiente, la cual tendrá una vigencia de 15 años y se renovará automáticamente si los operadores cumplen con los estándares de seguridad operacional exigidos. ANAC, como autoridad aeronáutica, mantendrá la responsabilidad de fiscalizar y certificar el cumplimiento de las regulaciones técnicas de seguridad para todos los operadores, quienes deberán obtener un Certificado Digital de Explotador de Servicios Aeroportuarios, también conocido como CESAR.
Para facilitar el acceso de nuevos operadores, ANAC publicará en su sitio web los modelos de procedimientos y documentos necesarios para obtener y mantener esta certificación. Las presentaciones para la autorización serán exclusivamente digitales y podrán ser realizadas por cualquier persona física o jurídica que cumpla con los requisitos establecidos.
Además, el nuevo sistema permite a los operadores negociar sus permisos y habilitaciones entre sí, siempre bajo los estándares de seguridad y con notificación a la autoridad competente cuando tales negociaciones impliquen la creación o extinción de derechos.
«Ningún terrorista sindical podrá tomar de rehén nuevamente un pasajero y arruinarles su viaje, sus vacaciones, su viaje laboral o por temas médicos, ni negarse a hacer su trabajo. El terrorismo sindical no tuvo prurito en secuestrar a más de 2000 pasajeros en 10 aviones», destacó el el vocero presidencial Manuel Adorni