La Cámpora será investigada en la causa de los cuadernos de las coimas
El juez Claudio Bonadio decidió que el tramo de la causa que investiga la estructura de cobro de sobornos que habría funcionado desde el ministerio de Planificación Federal, donde se involucró a dirigentes de La Cámpora -entre ellos al propio Máximo Kirchner-, debe continuar tramitando en otro juzgado. Después de indagar a los principales referentes de la agrupación K, decidió desprenderse de esta parte del expediente y tras el correspondiente sorteo, tendrá otro juez asignado.
Durante la instrucción, la causa de los cuadernos se fue ramificando a medida que se incorporaron nuevos testimonios y pruebas. A los líderes de La Cámpora se los indagó después de considerar los dichos de José López como imputado colaborador. En su extensa confesión hizo referencia a los principales dirigentes del espacio político.
Para Bonadio, en cuanto a las acusaciones que recaen sobre los dirigentes de La Cámpora, «tanto la imputación como las defensas materiales de los nombrados tratan sobre un objeto distinto al investigado en la presente causa, excediendo, el objeto procesal delineado por el Ministerio Público Fiscal», señala una resolución.
¿Qué había dicho José López? “Desconozco si De Pedro (el diputado Eduardo «Wado» De Pedro) conocía el sistema de recaudación. La organización de la Cámpora era atípica, Larroque, Julián Álvarez, y De Pedro tenían peso, Máximo lo manejaba más con el teléfono y Axel Kicilloff si bien estaba dentro del grupo lo veían más como un técnico, pero tenía mucha más llegada a Cristina”.
En otro tramo de su indagatoria, el ex secretario de Obras Pública indicó: «De Vido me dijo que ‘hiciste bien porque nosotros estamos financiando a De Pedro’. El financiamiento de De Pedro era general, no para un distrito en particular». Y concluyó: «estuve en una reunión con De Vido y llegó Olazagasti (José María, ex secretario privado del ministro) y comentó que sí había financiamiento a los ‘chicos de la Cámpora’, que eran Wado, Larroque, Julián Álvarez y Ottavis. Máximo estaba al tanto de todo el financiamiento de la Cámpora, y hablaba diariamente varias veces con su madre por este tema». Una aclaración: todas las referencias a «financiamiento» corresponderían a dinero proveniente de los sobornos recaudados entre los contratistas del Estado.
En función de estos dichos y otras medidas de prueba, como el análisis de los pendrive que le fueron secuestrados a Martín Larraburu, ex secretario privado de Juan Manuel Abal Medina, Bonadio llamó a declarar a Andrés «el Cuervo» Larroque y Eduardo «Wado» De Pedro y el legislador provincial José Ottavis. Los últimos en ser imputados e indagados, fueron Máximo Kirchner y Julián Álvarez, ex secretario del ministerio de Justicia.
Con las indagatorias concluidas y con los plazos en curso para decidir la situación procesal de los dirigentes camporistas, el magistrado decidió este viernes desprenderse de este tramo de la investigación.
Al respecto, el magistrado concluyó que «la intervención de los nombrados consistió en haber recibido el dinero proveniente de la asociación ilícita investigada para solventar distintas actividades políticas y financiar agrupaciones satélites del partido –“Frente Para la Victoria” – como es el caso de “La Cámpora”.
En función de la prueba reunida, Bonadio indicó que «no es posible afirmar que los nombrados hayan participado del sistema de recaudación de fondos de la asociación ilícita comandada por Néstor Carlos Kirchner y Cristina Elisabet Fernández, sino que su conducta se habría circunscripto a la recepción de dinero para destinarlo a actividades de naturaleza política y electoral, de modo irregular y fuera de la normativa vigente».-
Allí, el juez sostuvo que es otro el delito que debe investigarse sobre el comportamiento de los integrantes de La Cámpora, vinculado «al posible financiamiento espurio del partido “Frente Para la Victoria”, las agrupaciones satélites y las campañas electorales referidas», mientras que la investigación de los cuadernos «gira en torno al sistema de recaudación de fondos de la asociación ilícita comandada por Néstor Carlos Kirchner y Cristina Elisabet Fernández, por lo que se advierte que deberán tramitar de modo independiente».
Entonces, consideró que «no existe comunidad probatoria entre las investigaciones» y que la unificación de ellas «entorpecería ambas pesquisas, dada su naturaleza, la cantidad de imputados, la cantidad de la documentación reservada y la celeridad con la causa de desarrolla».
De Pedro y Álvarez habían recusado a Bonadio, planteando temor a la falta imparcialidad al momento de definir la situación procesal de los acusados. El planteo se fundó en la actuación de ambos dirigentes como miembros del Consejo de la Magistratura, donde promovieron sanciones contra el juez en su momento. De hecho, el juez es querellante en un expediente contra el ex secretario de Justicia.