Jorge Sampaoli se reunió con Mauro Icardi
«Todavía quedan dos o tres casilleros vacíos. Y por ahí uno es para el pibe. Ojo: además, tenemos que ver cómo llega Agüero»… La frase es de un integrante del cuerpo técnico de la Selección. Se refiere a la lista final de 23 jugadores para el Mundial de Rusia y en especial a la situación de Mauro Icardi, a ese «9» que disparó múltiples capítulos polémicos en celeste y blanco, a ese goleador que hoy estuvo en Milán algo más de una hora cara a cara con Jorge Sampaoli, quien le contó cuál es el panorama en cuanto a una posible convocatoria. Le avisó el técnico al centrodelantero que aparecerá seguro entre los 35 citados iniciales que dará a conocer el 14 de este mes, pero aún no le abre la puerta a la nómina final de 23.
Sampaoli bajó el perfil en forma notoria con respecto a la primera gira que había realizado por Europa para charlar con jugadores, cuando comunicaba en forma más aceitada, inclusive hasta con fotografías de cada encuentro. Ante muchas críticasinentendibles a esa metodología y en un contexto con mayor tensión, apeló al hermetismo esta vez. Y mucho más en este mano a mano con Icardi. Así, en general, los rumores hacen de las suyas. Y hasta llegó a instalarse en un momento del día que el «9» no había querido sentarse a conversar con el técnico. Pero no fue así.
Icardi asistió a la invitación de Sampaoli para dialogar. «Hubo la mejor onda», contaron más tarde desde el entorno del entrenador. El propio Mauro, más tarde, en su cuenta de Twitter, le contestó a un periodista que había insinuado una negativa suya al encuentro: «A la Selección Argentina siempre le digo que SI!! No hay que pensar mucho para decir que sí».
El DT le contó a Icardi que los dos centrodelanteros elegidos son Sergio Agüero y Gonzalo Higuaín. Ahí Sampaoli, palabras más, palabras menos, le repitió lo que había dicho en forma pública en la última gira. Aquella vez el casildense había señalado: «Cuando asumimos, Icardi fue el elegido. Pero luego entendimos que entre el Icardi del Inter y el de la Selección había diferencias. Todos los domingos demuestra lo que es, pero tal vez el tiempo de adaptación en la Selección es distinto. No lo descarto a Mauro y me genera orgullo que sea argentino, pero a veces los tiempos son otros y tenemos que decidir en cuanto a cómo los jugadores se relacionan con sus compañeros».
Esta vez, aparte de ese mensaje, a puro realismo, el técnico también le puntualizó la situación física del Kun, quien se recupera tras la artroscopia que le realizaron en la rodilla izquierda. La gran incógnita es cómo arribará Agüero al Mundial. Ese interrogante, al cabo, sostiene gran parte del hilo de ilusión que le queda a Mauro para saltar de la lista de 35 a la de 23. En ese ítem, además, Sampaoli fue claro: creen que el Kun será parte de la aventura rusa. Pero…
Llegar al Mundial es muy difícil para Icardi, aunque existen un par de elementos que llevan a Sampaoli a no cerrarle la puerta del todo al hombre que en el Inter ya gritó 27 goles en 31 partidos de la actual edición de la Serie A italiana: por un lado, la posibilidad de algún contratiempo en la evolución de la rodilla izquierda de Agüero; y por el otro, la propia ciclotimia del técnico, un hombre híper cambiante, que suele sorprender a cada paso. Justamente en esos dos aspectos se apoya la fuente de la Selección que dice: «Todavía quedan dos o tres casilleros vacíos. Y por ahí uno es para el pibe. Ojo…».
Icardi falla una oportunidad en el partido que Juventus le ganó al Inter el 28 de abril. (Foto: AP)
La otra reunión en Milán que sostuvo Sampaoli fue con Lucas Biglia, quien hace todo para recuperarse a velocidad de F1 de la fractura de las últimas dos vértebras lumbares que sufrió el 21 de abril en el partido contra el Benevento. También con el rubio volante son optimistas. Lo ven en el Mundial.
La gira de Sampaoli culminará este viernes en Roma, con dos encuentros: 1) Federico Fazio, con lugar seguro entre los 23; y 2) Diego Perotti, con sitio reservado entre los 35 y con chances de meterse en el selecto grupo mundialista. Eso sí, las repercusiones de ambas charlas serán infinitamente menores al mano a mano con ese «9» tan singular…