INDICADORES ECONÓMICOS
Por la recesión, el consumo cayó 4,6% en agosto y empeoran los pronósticos
Las ventas no muestran signos de recuperación pese a las declaraciones del gobierno nacional de mejoras en los salarios.
El consumo sigue en descenso y agosto no fue la excepción, registrando una caída del 4,6%, según datos de la consultora Focus Market. Pese a los anuncios del gobierno sobre supuestas mejoras salariales, las ventas no muestran signos de recuperación.
En comparación con julio, la baja fue del 3,2%, mientras que el acumulado interanual alcanza el 10,3%, lo que agrava aún más el panorama económico y genera preocupación en los analistas por el impacto prolongado de la recesión.
Las proyecciones para el cierre de 2024 son desalentadoras. Según expertos, es poco probable que el consumo logre repuntar en el corto plazo, arrastrado por la falta de medidas que reactiven la demanda interna.
El economista Damián Di Pace destacó que la comparación con el último trimestre de 2023 resulta compleja, dado que en ese periodo se aplicó el denominado «plan platita» del gobierno de Alberto Fernández, que incluyó una serie de medidas destinadas a estimular temporalmente el consumo.
Entre estas se destacaron el aumento de los planes sociales, facilidades de financiamiento y mejoras en pensiones y jubilaciones, todo enmarcado en un contexto electoral que permitió una leve reactivación de la economía, pero sin un efecto duradero. Esto hace que los indicadores actuales, desprovistos de tales estímulos, muestren una situación de mayor deterioro económico.
En agosto de 2024, el consumo experimentó caídas significativas tanto en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) como en el interior del país, reflejando el impacto generalizado de la recesión. En el AMBA, el consumo masivo registró una contracción del 11,5% en comparación con el mismo mes del año anterior, y una baja del 4,9% frente a julio de 2024, lo que evidencia la dificultad de recuperación en una de las zonas más pobladas y económicamente activas del país.
La situación en el interior fue aún más alarmante, con una caída interanual del 14,6%, superando ampliamente la retracción observada en la capital. En comparación con el mes anterior, el consumo en estas regiones descendió un 4,5%, dejando en claro que el deterioro económico afecta de manera más severa a las provincias, donde las medidas de estímulo y los recursos suelen tardar más en llegar o ser menos efectivos.