El trigo comienza a manifestar daños por la falta de lluvias
SÁENZ PEÑA (Agencia). Los pronósticos del tiempo no anuncian lluvias para los próximos días y el trigo, con poco más de 90.000 hectáreas en la provincia comienza a sentir el estrés, registrándose hasta el momento un quince por ciento de la superficie dañada.
La angustia sigue siendo el sentimiento del productor chaqueño «y, si bien se sucedieron lluvias en las últimas semanas, el problema es que no se alcanza a recuperar el perfil de humedad en el suelo».
«Es angustiante la situación porque, a pesar de que lluvias eventuales y puntuales podría permitir la siembra de girasol, la reserva de humedad no se restablece», menciona la ingeniera Flavia Francescutti, profesional del INTA que conduce la Subsecretaría de Agricultura del Chaco.
La oleaginosa está en sus primeros estadios «pero es el trigo el que está sintiendo la falta de agua y en algunas zonas más que en otras». «El grano panadero en algunos lotes está en etapa de floración o en llenado de granos, adelantándose mucho esa etapa».
El cultivo de trigo tuvo una intención de siembra de 134.600 hectáreas, pero se sembraron 92.670 hectáreas, es decir solo el 69 % de lo estimado. Ya se perdieron, de arranque, unas 450 hectáreas, según el informe de la Subsecretaría de Agricultura.
Salvo algunos chaparrones registrados la semana pasada, en gran parte de la provincia donde se implantó el cereal no hubo lluvias. El cultivo tanto en la zona Norte como en el Sur, atraviesa etapas vegetativas, con los primeros implantados ingresando en encañazón.
La falta de humedad comienza a manifestarse, presentando lotes manchoneados, con cuadros que en su estado van de buenos/regulares a malos.
SE ACELERÓ EL CULTIVO
«El trigo, si bien pudo haber sido sembrado temprano, no tiene ni tres hojas y está ya con la flor, lo que da la pauta de que el cultivo se aceleró demasiado», detalla la profesional. La ausencia de humedad se agrava además con el fuerte viento del Sur que se registra en los últimos días «que incrementa mucho más el estrés en las plantas».
El área sembrada con trigo alcanzó las 92.500 hectáreas, «un rango de superficie que es promedio en el Chaco». «Los delegados estiman que un quince por ciento del cultivo está dañado, dependiendo de la zona porque hay lugares en los que se observa un alto nivel de daño, pero hay otros donde todavía el trigo la está peleando bastante bien». El registro no contabiliza hasta el momento pérdida total, «pero hay daños».
Cabe recordar que la emergencia agropecuaria en el Chaco finalizó en julio, pero «un par de subcomisiones enviaron notas alertando de que próximamente podrían realizar la solicitud de declaración de emergencia» si las condiciones de escasa humedad siguen complicando a la producción primaria.
Algodón fuera de fecha
Las condiciones de sequía que perduran y se espera que comiencen a revertirse con el restablecimiento del período de lluvias a partir de finales de septiembre o principios de octubre, podrían incrementar la superficie con algodón. En el caso del textil, por la experiencia de la campaña pasada, se avizora la posibilidad de que el productor siembre a partir de noviembre, casi al borde de la fecha límite establecida por el Senasa.
Los productores están pidiendo e insistiendo a través de la Coprosave que se extienda la fecha de siembra del algodón, «lo que está siendo planteado y trabajado con el Senasa, que no es que está en desacuerdo, pero hay una normativa vigente que se debería modificar».
«Lo que hay que entender es que si se cambia la fecha de siembra, se deberá ser mucho más estricto con la data de destrucción de los rastrojos, que ya este año fue laxa debido a las condiciones climáticas, pero necesitamos garantizar sí o sí los 90 días de vacío sanitario para el control del picudo», detalló Flavia Francescu.
El girasol con aguante
El girasol, el otro cultivo que ya está sembrado en parte de la provincia, registró con las precipitaciones que ocurrieron en zonas puntuales de la provincia, la reanudación de la siembra de girasol en esos lotes «regados». El cultivo aceitero «tiene la ventaja de que tiene mucha resistencia a la sequía, especialmente en la primera etapa».
En la provincia se llevan implantadas casi 100.000 hectáreas, «pero con las lluvias que puedan darse en los próximos días los productores van a seguir sembrando, aun fuera de la ventana de siembra ideal».
«Seguramente se seguirá sembrando porque tenemos productores que solicitaron incluir algunos lotes más al seguro multirriesgo ofrecido por la Provincia ya que extenderán el período de siembra», refirió Francescutti.
«El registro, hasta la fecha, es de 98.000 hectáreas, pero entendemos que se superará ese límite, aunque no se alcanzará la proyección de la intención que era de 360.000 hectáreas», agregó la subsecretaria de Agricultura de la provincia.