El dólar bajó en el debut del control de cambios y el Gobierno apuesta a que se mantenga estable
La divisa cerró a $58,41. Una parte de la oposición celebró las medidas y los empresarios las tildaron de «inevitables».
En el primer día de vigencia de las restricciones cambiarias, el dólar minorista se negoció a 53,32 pesos para la compra y 58,41 para la venta. Es decir, bajó más de tres pesos respecto al valor del viernes. Esa respuesta por parte de los mercados representó un alivio para el Gobierno, que igualmente prestará atención a la evolución en las jornadas siguientes, en especial a la de este martes, cuando operen todos los mercados en forma global, teniendo en cuenta que este lunes fue feriado en Estados Unidos.
Desde el Ministerio de Hacienda garantizaron que los ahorros son «intocables» y destacaron la reacción de la city ante las nuevas medidas, en medio del retroceso del dólar. El ministro Hernán Lacunza insistió en que los topes a la adquisición de divisas «son de emergencia».
En paralelo con la apertura de los mercados, en Casa Rosada el presidente Mauricio Macri reunió al Gabinete para seguir la evolución del tipo de cambio. A la salida del encuentro, el titular de Hacienda se mostró confiado y aseguró que el Gobierno trabaja para «cumplir con el cuidado de los argentinos». Además, dijo encontrarse «sereno, tranquilo» ante el difícil escenario económico, mientras reiteró que las medidas tomadas por el Ejecutivo son «incómodas».
«El comportamiento del mercado fue positivo»
El presidente del Banco Central, Guido Sandleris, subrayó que las medidas anunciadas durante el fin de semana tienen por objetivo crear un “paraguas cambiario” que permita a la economía transitar de la mejor manera posible el proceso electoral.
“El comportamiento que vimos en el mercado cambiario fue bastante positivo, teniendo en cuenta que recién empiezan a entrar este sistema”, dijo durante una rueda de prensa brindada este lunes por la tarde en la sede del Banco Central.
Para el funcionario se trató de una jornada “atípica” debido a que hubo feriado en los EEUU -algo que suele repercutir en el volumen de los negocios- y porque fue la primera rueda cambiaria tras los anuncios. Ante eso, las entidades bancarias debieron ajustar sus sistemas a las nuevas disposiciones, por lo cual advirtió que habrá que ver cómo responde el mercado en los próximos días.
Sandleris, tras ratificar la continuidad del programa monetario, señaló que el Banco Central inició “conversaciones” con las autoridades del Fondo Monetario Internacional (FMI) con el objetivo de “redefinir” las metas previstas para septiembre, debido a la incidencia que pueden tener sobre estas variables las medidas dispuestas este fin de semana.
Al ser consultado sobre esas negociaciones, el titular del organismo monetario evitó brindar precisiones. “Quiero dejar en claro que estas medidas no reemplazan a la estricta política monetaria que venimos implementando desde septiembre del año pasado, y que mantendremos hacia adelante. Son medidas complementarias, en un contexto de alta incertidumbre”, enfatizó.
Respaldo de un sector de la oposición
El candidato a presidente de Consenso Federal, Roberto Lavagna, afirmó que «el Ministerio de Hacienda efectivamente aceptó la realidad», a la vez que elogió a Lacunza por «admitir lo que no reconocían las anteriores autoridades».
«La deuda que se ha tomado en los últimos años ha sido muy importante, particularmente en un país en donde la economía está parada: si estuviera creciendo se podría hacer más soportable, pero en el caso argentino era evidente que esa deuda en algún momento iba a terminar generando situaciones como las que estamos viviendo», agregó Lavagna en declaraciones periodísticas.
Por su parte, el postulante presidencial de Despertar, José Luis Espert, sostuvo que «habría que haber evitado llegar a una crisis» y consideró que hacer pronósticos en este contexto sería «temerario». También sostuvo que «el Gobierno tuvo pésimos diagnósticos y no escuchó a nadie» y dijo no saber si las medidas impulsadas funcionarán, al advertir que «el que dice cómo sigue esto es un verdadero chamuyero».
Mientras tanto, Alberto Fernández optó por llamarse a silencio, en medio de su gira por Madrid. Solo se limitó a tuitear sobre el Día de la Industria, en un mensaje en el que aseguró que él «no está del lado de los especuladores».
«No eran medidas deseables pero sí inevitables»
Los máximos dirigentes de la Unión Industrial Argentina (UIA) coincidieron en que las medidas anunciadas por el Gobierno «no eran deseables», pero las calificaron como «inevitables». Lo hicieron este lunes, reunidos en el almuerzo por el Día de la Industria.
«Hay que trabajar entre todos los sectores porque la situación es lo suficientemente crítica. De lo contrario vamos a estar con graves problemas», pidió José Urtubey, presidente de la UIA.
«La situación de la industria después de la gestión de Macri es pésima. Se perdieron casi 200 mil puestos de trabajo, es un desastre», analizó. Al ser consultado por el precio de la moneda estadounidense señaló: «No se puede decir cuál es una cotización ideal del dólar».
Mientras tanto, Daniel Funes de Rioja subrayó que los anuncios lo tomaron por «sorpresa». «Muestra la complejidad de la situación que nos toca vivir. Hay preocupación. Eran no deseables pero sí inevitables», añadió el vicepresidente de la Unión Industrial Argentina.
Durante el encuentro, los dirigentes también aprovecharon para discutir los documentos que les presentarán a los candidatos, con programas de corto y mediano plazo. Entre los empresarios que asistieron estuvo Cristiano Rattazzi. «Todas las medidas son hasta fin de año. Luego habrá que mirar el país a largo plazo», consideró el presidente de Fiat Chrysler Automobiles.