El aumento del gas golpea al bolsillo de los saenzpeñenses
La garrafa de 10 kilos de costar $12.000 tiene ahora un valor de $15.000 y se incrementa un poco más con el envío a domicilio. El cilindro de 45 kilos llegó a los $60.000.
Tras la desregulación en los precios del gas, las garrafas de diez kilogramos se venden en las mismas plantas envasadoras a 15.000 pesos, mientras que los cilindros de 45 kilos, tienen un costo de 60 mil pesos, pizarra actualizada a la fecha, según confirmaron. Además, dijeron que «este precio actual podría continuar paulatinamente en las próximas semanas, donde el precio de la garrafa de diez kilogramos podría llegar a costas los 20.000 pesos».
Se pudo saber que «tras la remarcación en el precio del gas envasado en sus distintos niveles, los precios se ajustaron alrededor de dos mil pesos, pasando de costar 12.000 pesos, a 15.000, para las garrafas de diez kilogramos. Importe que se elevaría más, si se paga el flete a domicilio, llegando hasta 20.000 pesos, según el camión de reparto», confirmaron ante la consulta de NORTE.
PRECIO REAL
Desde algunas de las plantas de envasadoras de gas, sostuvieron que «a pesar de la desregulación en el precio del gas envasado, todas las compañías están cobrando medianamente un valor para que todos puedan acceder a una garrafa de diez kilogramos», indicaron. «Si realmente se tendría que ajustar los valores a los costos que significan para cubrir todos los gastos, hoy el precio de la garrafa desde las plantas, seria por lo menos de 20 mil pesos», sentenció uno de los encargados consultados.
Es que la desregulación en el precio también indica que «se puede vender a un precio por debajo del que se oferta en las pizarras, pero que no se cubrirían los costos, porque lo que más aumento fue el flete, y eso se ajusta mes a mes con el precio de los combustibles», explicaron.
LAS CRÍTICAS
El impacto en el bolsillo de la gente dará otro empujón a una situación económica complicada, sobre todo los estratos sociales más bajos, donde gran parte de esa franja, está esperando señales «a favor por parte del gobierno nacional, sin embargo, muy por el contrario, continúa liberando el mercado, donde cada vez se hace más cuesta arriba poder cubrir las demandas básicas de una familia», aseveró un cliente.
Asimismo, los consultados dijeron que «no queda otra que seguir ajustándose, pero que la situación está llegando al límite, no sabemos hasta cuándo podremos resistir todo esto», manifestó el jubilado Alfredo Coronel. Quien se refirió además de la situación de su sector, que «antes le depositaban el equivalente a una garrafa, pero que hace un año, ya no le están pagando, y es otro retroceso, que impacta en las miserables jubilaciones», reprochó el jubilado.
LOS SUBSIDIOS
Si bien desde el comunicado a nivel nacional indicaron que se mantendrán los subsidios para las clases más vulnerables, porque con la desregulación se pretende establecer un sistema de precios más transparente y competitivo, en el que los valores reflejen los costos reales de producción, fraccionamiento y distribución. En la que se eliminaran las barreras regulatorias que impedían una libre asignación de recursos, y promover un acceso más equitativo al «gas licuado de petróleo» GLP en todas las regiones del país, especialmente en aquellas donde no llega la red de gas natural», justificaron.
En este sentido, cabe resaltar que «los subsidios del Programa Hogar seguirán vigentes para los sectores vulnerables, garantizando que las familias con menores ingresos y sin acceso a la red de gas continúen recibiendo asistencia económica para la compra de garrafas», según el comunicado a nivel nacional y que por ende se hace extensivo a las plantas envasadoras y distribuidoras.