Conmoción en la comunidad educativa por el asesinato de la profesora Zabala
Carla Zabala fue ultimada por su pareja, César Cardozo, el sábado, y el femicidio originó expresiones de compañeras y familiares de la mujer de 28 años que se desempeñaba como maestra jardinera.No se conoce el motivo que desencadenó una fuerte discusión en la habitación donde estaban Zabala y Cardozo. Hay una única testigo: la abuela de 74 años de Carla. La anciana escuchó dos detonaciones y corrió hacia la pieza.El asesino, antes de cometer el homicidio y luego quitarse la vida, aseguró la puerta con una traba. Marta Ávila, abuela de la joven, entró en pánico y avisó a las autoridades sobre lo que estaba ocurriendo en su domicilio, ubicado en la calle Cabral 215. Los policías llegaron y patearon la puerta. Al entrar, hallaron una escena espantosa: ambos estaban muertos, y al lado del cuerpo de Cardozo se encontró un revólver con el que mató a su novia antes de dispararse en la cabeza.El fiscal Elio Mari está a cargo de la causa y, como ha sucedido en la mayoría de los nueve femicidios registrados este año en Chaco, no había denuncias previas por violencia de género. La pareja no tenía hijos propios ni en común. Carla era maestra jardinera, y su crimen originó gran conmoción en la comunidad.
El mensaje del Jardín donde trababaja
«El Jardín de Infantes N° 183 «Susana Pereyra» participa con profundo dolor el fallecimiento de Carla Zabala, docente de la institución. Con mucha tristeza nos toca despedir a una excelente compañera y persona. Elevamos una oración por su eterno descanso y brindamos nuestras condolencias a todos sus familiares. Tu recuerdo quedará entre nosotros. Q.E.P.D.», fue el mensaje del jardín donde trabajaba la educadora.
La escuela donde se educaron víctima y femicida
La EES Nº 129 fue otro de los establecimientos de Charata que reflejó la gran conmoción en la comunidad, e incluyó en su mensaje al asesino de la docente: «La EES N° 129 participa del fallecimiento de Carla Zabala y César Cardozo, exalumnos de nuestra institución. Mandamos saludos de fuerza y resiliencia a sus familias en tan difícil momento».
«Hasta siempre, mi negra, amiga, compañera y prima, mi cómplice en todo. Te voy a extrañar mucho. Descansa en paz. Me quedo con el corazón destrozado. Hasta pronto», escribió Pamela, familiar de la víctima.
«Fuiste quien nos salvó en un momento y no lo sabías; fuiste nuestra curita al alma. Nunca te voy a olvidar», manifestó en redes una compañera de trabajo.