¿Cómo ahorrar energía utilizando corchos?: el novedoso truco para reducir el consumo
Se trata de una estrategia para reducir la factura de energía eléctrica y mejorar el rendimiento de las heladeras.
En tiempos en los que el ahorro energético se volvió una prioridad en muchos hogares chaqueños, surgen trucos y estrategias para optimizar el consumo. Uno de los más curiosos involucra el uso de corchos dentro de la heladera. Esta sencilla técnica promete no solo reducir la factura de luz, sino también mejorar el rendimiento del electrodoméstico, haciéndolo más eficiente y alargando su vida útil.
El método fue respaldado por estudios de la Universidad de Harvard y puede ayudar efectivamente a optimizar el rendimiento de la heladera y a reducir el consumo de electricidad.
Consiste en colocar corchos en los espacios vacíos de la heladera, lo que reduce la cantidad de aire que el motor necesita enfriar. Al haber menos aire, el electrodoméstico trabaja de forma más eficiente, ahorrando energía y alargando la vida útil del equipo.
Esto sucede porque el corcho de vino es un material con una estructura ligera y porosa, lo que lo convierte en un eficaz moderador del flujo de aire, permitiendo redirigir el aire frío hacia las áreas que lo necesitan y generando una distribución más uniforme del frío.
Otro beneficio es la reducción de la escarcha, ya que la acumulación de hielo obliga a la heladera a trabajar más para mantener la temperatura apropiada.
¿Cómo emplear esta técnica?
Para empezar a ahorrar energía es necesario seguir una serie de pasos:
Una vez que el corcho cumplió su función de sellar la botella de vino, se puede colocar en una de las estanterías de la heladera.
Es importante que el corcho esté en las zonas donde haya más espacio libre, ya que es allí donde más aire debe enfriarse.
De esta manera, el material actuará como un regulador del aire frío, disminuyendo el esfuerzo que el electrodoméstico necesita para enfriar su interior.