Chile denunció violación de su espacio aéreo y desplegó aviones de combate: Argentina negó la invasión
La Fuerza Aérea chilena movilizó aviones F-5 tras detectar un «tráfico aéreo no identificado» en el Estrecho de Magallanes. El Gobierno argentino niega la presencia de una nave de su país en la zona.
La Fuerza Aérea de Chile llevó a cabo el despliegue de aviones de combate tras detectar un posible ingreso no autorizado en su espacio aéreo. El operativo se activó desde la base aérea de Chabunco, ubicada en Punta Arenas, luego de que se registrara una «alerta de tráfico no identificado» en el sector oriental del Estrecho de Magallanes, según confirmó la ministra de Defensa chilena, Maya Fernández.
Fernández explicó que el incidente se produjo cerca de las 20:00 horas del martes, cuando se detectó un tráfico aéreo no identificado en el área. «Existió una alerta de tráfico no identificado y se activaron los protocolos en resguardo de nuestra soberanía», señaló la funcionaria, destacando que los aviones F-5 fueron enviados a patrullar la zona en respuesta a la alerta.
Sin embargo, el contacto con el objeto no identificado se perdió posteriormente, lo que llevó a la apertura de una investigación para esclarecer el episodio. «La Fuerza Aérea activó los protocolos y defendió nuestra frontera y soberanía, como corresponde», enfatizó.
El medio local BíoBío reportó que la presunta violación del espacio aéreo chileno habría ocurrido a unos tres mil pies de altura, entre el monte Aymond y el Estrecho de Magallanes. El despliegue de los aviones culminó con una revisión exhaustiva del área, sin hallarse ninguna aeronave o dispositivo.
En tanto, la ministra del Interior chilena, Carolina Tohá, se pronunció al respecto a través de un video en redes sociales, indicando que «tenemos que aclarar si fue una nave realmente, de qué tipo, puede haber sido privada, puede no haberlo sido, puede haber sido un avión, puede haber sido un helicóptero. Todo eso tiene que ser parte de la investigación que se está llevando adelante». Tohá aseguró que se actuó conforme a los protocolos establecidos y que la «nave abandonó el territorio nacional».
Tohá también comunicó que se estableció contacto con el Gobierno argentino a través del embajador chileno en Buenos Aires, José Antonio Viera-Gallo, con el objetivo de colaborar en la investigación. No obstante, hasta el momento, el presidente Gabriel Boric no se ha pronunciado sobre el asunto.
Por su parte, desde Argentina, la Casa Rosada negó que un avión argentino hubiera ingresado al espacio aéreo chileno. «No hubo ningún avión de la fuerza aérea argentina ni de línea que haya viajado por la zona en ese horario», declaró un funcionario, subrayando que tampoco se recibió ninguna notificación formal de parte de Chile. El Ministerio de Defensa argentino aclaró que la única operación aérea de ese día fue un vuelo de LADE con el sistema Twin Otter, realizado entre las 12:00 y las 17:00 horas.
El Ejecutivo argentino, además, expresó su intención de mejorar las relaciones diplomáticas con Chile, aunque criticó la falta de comunicación por parte de algunos funcionarios chilenos antes de hacer pública la denuncia. «No nos contactó ninguna autoridad ni preguntaron si teníamos información sobre el caso», señaló un colaborador del Gobierno.