Sáenz Peña Roban y faenan caballos para vender la carne a las carnicerías
Vecinos y personal de la División rural, aseguran que roban y faenan animales: caballos, yeguas, burros, y se los venden a carniceros para hacer chorizos y embutidos
De manera particular, un hecho indignó a los pobladores de la localidad, ya que una yegua y su cría fueron robados en zona rural muy cercana a Sáenz Peña. Minutos después, vecinos alertaron que encontraron en zonas del basural municipal los restos de las dos yeguas, consistente en cueros y vísceras ya que los cuatreros se habían llevado la carne
El lamentable suceso de inseguridad rural causó profunda indignación en el sector de los minifundistas y en toda la sociedad civil, pues afirmaron que «esa carne ya se vendió”.
Lo más impresionantes es que los robos de animales se dan en las afueras de Sáenz Peña y no discrimina animales: caballos, yeguas, burros y ahora hasta perros empezaron a desaparecer, aseguraron los vecinos.
“Toda esa carne va a parar a las fábricas clandestinas de chacinados y también a carniceros inescrupulosos de barrios humildes, porque a esa carne ellos la mezclan con otras y con eso elaboran chorizos y embutidos, o la venden como carne molida y hasta milanesas también hacen con algunos cortes», afirmaron.
Efectivos policiales hallaron los cueros y las vísceras de los equinos en el basural municipal ubicado en calle 17 prolongación hacia el oeste de nuestra ciudad. Los animales habrían sido faenados en ese mismo lugar y los restos, quedaron esparcidos dentro de una laguna de la zona.
El hallazgo generó profunda indignación en el sector minifundista del centro chaqueño ya que de un tiempo a esta parte se agudizó el delito rural, especialmente el robo de caballos. También agrupaciones protectoras de animales y la comunidad en general elevaron airados reclamos ante semejante barbarie.
«No puede ser, pedimos ya mismo el control bromatológico en todas y cada una de las carnicerías de Sáenz Peña porque al final no sabemos lo que estamos comiendo. Todo Sáenz Peña sabe que esa carne de caballo vende a las carnicerías y a las fábricas de embutidos, y esos mismos establecimientos proveen a los comedores barriales».