Aire acondicionado: ¿Amenaza de propagación del coronavirus?
Coronavirus en Argentina Si bien no existen resultados contundentes para confirmar que este artefacto pondría en riesgo la salud con el Covid-19, varios especialistas sostienen esta hipótesis y lanzan advertencias.
Mientras se espera la vacuna que pueda erradicar la presencia del coronavirus, otro factor se avecina en la vida de los argentinos que puede llegar a expandir la enfermedad. Se trata de la llegada del calor y con él, el uso que damos a diario al aire acondicionado, que por un lado brinda una sensación de bienestar, y por otro, algunos profesionales de la salud creen que puede propagar el virus, aunque esto sigue siendo materia de debate y, a pesar de ciertas investigaciones, no está confirmado aún.
Lo cierto es que este tipo de aparatos eléctricos reciclan el aire en lugar de renovarlo, carecen de filtros para virus o bacterias, se suelen usar con ventanas y puertas cerradas y pueden empeorar el nivel de desplazamiento de las pequeñas partículas exhaladas o aerosoles, una vía de transmisión del coronavirus.
¿Cómo se contagia?
Es sabido que la transmisión del Covid-19 se produce a través de gotas respiratorias por el contacto directo con personas infectadas o superficies contaminadas con secreciones de personas enfermas, aunque en la mayoría de los casos se sabe que ocurre en sitios interiores con poca corriente de aire.
Por ende, los profesionales de la salud sostienen que “es probable que la inhalación de pequeñas gotas en el aire sea otra vía de infección, si bien persiste la incertidumbre con respecto a las contribuciones relativas de las diferentes vías de transmisión. Los sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado (HVAC) se utilizan como medida primaria de control de enfermedades infecciosas en algunos ambientes sanitarios. Sin embargo, si no se usan correctamente, podrían contribuir a la propagación de enfermedades transmitidas por el aire, como se propuso en el pasado para el SARS”.
A pesar de cierta definición de los científicos respecto del presunto contagio de esta enfermedad por medio de este aparato, todavía no existen resultados contundentes para confirmar esta hipótesis.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) brindó una serie de recomendaciones a tener en cuenta: “En todos los lugares de trabajo, escuelas y alojamientos turísticos debe haber aire puro y limpio. La OMS recomienda que se aumente la tasa de ventilación por medios naturales o mecánicos, preferiblemente sin reciclar el aire. En caso de que no pueda renovarse el aire, es preciso limpiar los filtros con frecuencia, sobre todo en los puestos donde hay un riesgo medio o alto de exposición al Covid-19 para los trabajadores, como ocurre con los que atienden a los clientes en el comercio minorista o en los alojamientos turísticos y con los trabajadores domésticos”.
Situación en aviones y micros
Si bien se tiene una idea de lo que puede ocurrir adentro de un hogar o lugar de trabajo y qué
recomendaciones llevar adelante, la duda que aparece en todos, sobre todo en lo que respecta a los sectores turísticos, es que podría ocurrir en espacios cerrados como aviones o micros, teniendo en cuenta la llegada de las vacaciones, que se avecina en breve.
Para responder este importante interrogante, un facultativo explicó que “son dos situaciones diferentes, porque los aviones están equipados con potentes filtros de alta eficiencia HEPA 14 que, junto con la recirculación de aire externo, disminuye la posibilidad de contagio”.
En cambio, “los micros no cuentan con estos mecanismos, por lo que tendrían que ir con las
ventanillas abiertas oimplementar algún sistema de filtrado adicional”, concluyó el trabajador de la salud.
Lo cierto es que, si lo que el profesional de la salud dijo sobre los micros de larga distancia es cierto, habrá que esperar cómo definen estas empresas los viajes al interior del país, ya que en cierta medida representaría una pérdida económica para el nominado sector de transporte de pasajeros.