Volvieron a aumentar las naftas entre 5% y 8%
YPF aplicó ayer un aumento de naftas súper del 5%. En el caso de los combustibles premium, la suba es del 8%, mientras que el gasoil trepó menos, en un rango menor al 1%. Shell y Axion podrían sumarse pronto.
La suba -que fue adelantada por Clarín en su edición del sábado- fue decidida por la petrolera estatal tras una reunión con el ministro de Energía, Javier Iguacel. Aunque en ese encuentro no se habló de cifras, según distintas fuentes, el ministro avaló la decisión de YPF. En Energía creen que la firma estatal puede decidir la política de precios del sector y que el resto de las petroleras la emularán.
Antes de irse del ministerio de Energía, Aranguren había acordado con las petroleras que hubiera dos aumentos de 3% cada uno en junio y julio. Pero la devaluación pulverizó esa estimación y llevó a una revisión hacia arriba.
Más de la mitad de la propiedad de YPF es del Estado nacional. Sin embargo, la compañía posee un management independiente. En el sector creen que la petrolera pasará un tiempo más político. «Hay que cuidar a los combustibles, cuidar a los clientes y continuar con las inversiones,», lo definió ayer Iguacel en América 2.
El Gobierno estima que YPF aplicará recomposiciones que el mercado pueda pagar y no provocarán mayores saltos inflacionarios. La decisión de aumentar menos el gasoil -que se usa en transporte de personas y mercaderías- mientras se avanza en las «premium» (que consume un segmento de mayor poder adquisitivo) parece ir en esa dirección.
Axion y Shell, las segundas refinadoras más importantes del mercado, no tenían tomada aún una decisión sobre futuros incrementos, pero en general suelen seguir al líder.
El razonamiento del Gobierno es que las otras compañías suelen moverse al ritmo de YPF. La petrolera estatal está integrada (producción y refinación), mientras que la fusión de Pan American Energy y Axion también va en ese camino. La única refinadora que depende de petróleo que no posee es Shell.
El precio del petróleo crudo está en ascenso. La «liberalización» de ese mercado -en septiembre del año pasado- provocó mayores importes en los surtidores locales. Aunque el Gobierno no estudia revertir ese funcionamiento de mercado, buscará que YPF actúe como un referente que unifique la situación política con los vaivenes de mercado.
Las petroleras aseguran que tienen un retraso de sus importes del 30%. Por el aumento del precio del crudo -que cotiza en dólares- y la devaluación del peso frente al dólar, que es imposible de medir porque nadie sabe hasta dónde puede llegar.