Se agrava la escasez de gasoil la situación es crítica en ocho provincias y complicada en otras diez
El norte del país es el más afectado y además en las zonas de frontera aparece la demanda extra de los extranjeros.
Los reclamos por el faltante de gasoil se fueron intensificando en los últimos dias en distintas provincias del pais. El foco de la escasez está en el Norte pero se extiende a otras provincias con distinta intensidad. Esta situación se da en el marco de la plena cosecha para el campo y de la mayor utilización del combustible en las economías regionales. Los inconvenientes para conseguir combustible para la producción coinciden con los festejos por los 100 años de YPF, la petrolera controlada por el Estado argentino.
Un relevamiento de la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC), a través del denominado “Mapa de abastecimiento de gasoil”, determinó que son ocho las provincias en rojo que tienen muy bajo o nulo suministro en las estaciones de servicio. Ellas son: Jujuy, Salta, Formosa, Tucumán, Misiones, Corrientes, Santa Fe y Entre Ríos.
Ademas, según la entidad, otras siete provincias también tienen problemas, aunque no críticos, porque el promedio de suministro es de sólo 20 litros por unidad: estas son San Juan, Mendoza, Chaco, Santiago del Estero, Córdoba y Buenos Aires y CABA.
Un tercer grupo, integrado por Catamarca, La Rioja y San Luis, aparece con problemas más leves
Roberto Guarnieri, presidente Fadeeac, dijo que el faltante lleva más de dos meses y «queda en claro que se trata de un problema generado por la falta de divisas y la dificultad para avanzar rápido en las políticas que se requieren».
Guarnieri se quejó de que en Argentina «los camiones están varados a orillas de la ruta, por falta de gasoil.»Si no se encuentra una solución de manera urgente, empezaremos a ver desabastecimiento. No podemos llevar la cosecha en tiempo y forma, ni el ganado o los alimentos. La industria en general empezará a sentir las consecuencias», sostuvo el titular de la federación empresarial.
Desde la Camara de Estaciones de Servicio y Afines del Nordeste, señalaron que la escasez existe en todas las estaciones de servicio, las que por otra parte, despachan con cupos que dependen del stock de cada estación.
En el caso de los camiones, se les puede vender entre 50 a 100 litros. A las camionetas, 50 litros de combustible. Pero ese es el máximo y en los camiones, el tope es de 150 litros. Según la entidad, la situación es “dramática”, especialmente agravada por la gran cantidad de transporte internacional que entra por la zona de Iguazú y Bernardo de Irigoyen, en Misiones, que vienen a abastecerse en los surtidores locales.
Si bien el cupo de las estaciones se renueva a principios de cada mes, cuando un estacionero pide mayor cantidad de combustible porque está vendiendo más, la respuesta de las petroleras es tajante: “arreglate con esto”, les responden.
“Las dos primeras semanas de mes la piloteamos y en la tercera, ya se hace dramático”, contó un estacionero asociado a la entidad: “además, en los últimos dias del mes, hay que recorrer unas siete estaciones para cargar pocos litros”, se quejó.
La cámara había advertido en octubre del año pasado antes de que se abriera la frontera sobre el crecimiento de la demanda «extra» debido a la llegada de paraguayos y brasileños para llenar sus tanques..
La situación llegó a tal punto que YPF, en la ciudad de Posadas, fijó un precio diferencial para los extranjeros. Les cobran $300 pesos el litro de nafta y $175 el Infinia diesel, mientras que a los compradores paraguayos se lo venden a $240.
“De todas maneras, los paraguayos se estacionan a dos cuadras de las estaciones y alquilan o roban patentes argentinas», señalaron en la cámara de estacioneros.
Otro de los recursos que se implementó a partir de la escasez de gasoil es que habitualmente llega un “camión lechero” que baja en cuatro o cinco estaciones y entre todas reparte los 36000 litros asignados.
Esta semana el Gobierno se expidió sobre el tema de los faltantes de combustible con el argumento de que el problema responde a una mayor demanda. El miércoles anunció que va a importar más gasoil “para asegurar la provisión ante los crecientes reclamos de las cámaras de transportistas de carga que aseguran que en ocho provincias del país hay serios problemas de abastecimiento del combustible”.
El jefe de gabinete Juan Manzur dijo a periodistas que todo lo que tiene que ver con materia energética es prioritario para el Gobierno, que va a «traer la totalidad de gasoil que haga falta», para lo cual, sostuvo, «están los dólares».
El funcionario señaló que mantuvo conversaciones con el ministro de Economía, Martín Guzmán, y autoridades de la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF) para resolver este faltante de energía, que se resolvería en un par de días.
Para los economistas la explicación va por otro carril: señalan que una de las razones del desabastecimiento es que para YPF y las petroleras privadas no resulta rentable importar gasoil porque no lo pueden vender al precio en que lo compran ya que el Gobierno evita que se traslade todo su valor al mercado en el actual contexto inflacionario.